Los medios digitales desde una perspectiva de género: ¿cómo afecta la violencia simbólica a niñas y adolescentes?

En este 8M, desde Chicos.net y Grow – Género y Trabajo elegimos ver con lentes de perspectiva de género algunos de los temas que afectan a las niñas y a las adolescentes en las redes sociales. Para eso, analizamos algunas manifestaciones de la violencia simbólica hacia las mujeres, a partir de los videos de la campaña www.eligetuforma.org.

Sentirnos inseguras, inadecuadas, imperfectas, feas e incómodas con nuestra imagen y nuestro cuerpo son sensaciones frecuentes para nosotras: niñas, adolescentes y mujeres adultas. ¿Por qué?  Tiene que ver con que los mandatos vinculados a la apariencia física tienen mayor incidencia en las mujeres. Sobre nosotras recae el imperativo de la delgadez, la juventud, la piel perfecta y libre de vellos. También el pelo libre de canas y siempre recién salido de la peluquería. Hoy estos mandatos, que se difundieron por medios tradicionales durante tantas décadas, también se reproducen en las redes. 

 

La socióloga Esther Pineda, especialista en feminismo, profundiza sobre este tema: 

“Los perfiles con más seguidores, más visitas, más likes siguen siendo aquellos que reproducen, promueven y monetizan los estereotipos de belleza hegemónicos. Esto genera comparación, imitación, ansiedad y depresión entre quienes consumen estas redes sociales, sobre todo, en adolescentes por no alcanzar el canon. Además, los algoritmos invisibilizan las cuentas y posts de personas racializadas y de la diversidad corporal, haciendo que tengan un menor alcance”.

 

¿Qué es la violencia simbólica?

En distintas etapas de la vida, las mujeres y otras identidades de género se ven frente a situaciones que implican violencia simbólica: es aquel tipo de violencia que no se traduce en agresiones físicas, sino que opera de manera “invisible”.  En las redes sociales, así como en las publicidades, nos invade esta violencia de manera permanente produciendo efectos en cómo las personas se autoperciben y se vinculan.Las maneras de acercarse al ideal de belleza vigente en cada época variaron a lo largo de la historia: desde usar prendas que incomodan o hacer dietas, hasta someterse a cirugías estéticas.

Hoy, la forma más cotidiana en que se manifiesta la imposición de la hegemonía corporal es a través del uso de filtros que “embellecen”. La oferta es enorme y está a un par de clics. Sobre este tema, una encuesta realizada en 2020 por la organización británica para jóvenes Girlguiding, encontró que un tercio de las niñas y mujeres jóvenes no publicarían selfies sin usar un filtro para cambiar su apariencia. Por otro lado, el 39% de los 1.473 encuestados, de entre 11 y 21 años, dijeron que se sentían molestos porque no podían verse iguales en la vida real que en internet. Fuente.

Y si hablamos de mandatos corporales impuestos sobre las mujeres, es imposible dejar de mencionar una de sus manifestaciones más crudas: las dietas e imposiciones de delgadez sobre el cuerpo. Como todos los otros impuestos, las dietas “mágicas” no son algo reciente, las venimos viendo hace años en los medios. Pero hoy, estas propuestas circulan en el celular -incluso sin que las estés buscando- y, en muchos casos, no se sabe de dónde sale la información, ni hay expertos/as que avalen su veracidad. La importancia de la educación crítica de medios se vuelve esencial en estos casos. En tiempos donde circula un flujo enorme de información de forma veloz, detenerse para chequear las fuentes de los contenidos que circulan en las redes es fundamental. 

Los videos sobre dietas forman parte de un entramado más grande de violencia simbólica que impone estándares imposibles sobre los cuerpos, y que se manifiesta incluso en la ley: hoy en Argentina, por más que exista una Ley de Talles desde 2021, esta no se respeta, y la idea de que “si no encontrás ropa de tu talle el problema es tu cuerpo y no la ropa” continúa. 

¿Qué podemos hacer?

Es complicado dejar atrás los estándares de belleza y delgadez de la noche a la mañana; hay supuestos que cuestan años abandonarlos, pero podemos intentar deconstruirlos día a día desde la familia, la escuela y la sociedad en conjunto. Una buena idea para iniciar conversaciones es utilizar disparadores como noticias de la actualidad, imágenes o los videos de www.eligetuforma.org.

Algunos consejos para dialogar sobre estos temas en familia:

• Escuchar qué tienen para decir los y las adolescentes sobre sus identidades y gustos. ¿Qué modelos siguen en redes ? Dialogar sobre las personas y los hábitos que tienen como modelo, reforzando que todas y todos tenemos personalidades y cuerpos diferentes.
• ¿Cómo se sienten con sus cuerpos? Reflexionar sobre esto haciendo hincapié en que las diferencias son las que nos hacen personas únicas.
• ¿Qué filtros y efectos usan? ¿Cómo quieren que los y las vean? Pensar junto con ellas y ellos qué cosas muestran de su persona en sus cuentas y para qué.
• Recomendamos ver en conjunto especialmente los videos sobre imagen personal y hábitos perjudiciales de #EligeTuForma.