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¿Cómo acompañar el uso de pantallas en casa?

19 de septiembre 2024

Conversamos con Carolina Duek en el primer webinar del ciclo "Elige tu forma de conversar en familia" del programa #EligeTuForma.

¿Cómo poner límites al uso del celular? ¿Cuáles son las oportunidades que nos brinda la tecnología? En el primer encuentro del ciclo “Elige tu forma de conversar en familia”, Carolina Duek, Dra. en Ciencias Sociales e Investigadora Independiente del CONICET, y Andrea Urbas, directora de Chicos.net y especialista en ciudadanía digital y derechos de la niñez, reflexionaron acerca de cómo gestionar de manera efectiva el uso de pantallas en el entorno familiar. El encuentro estuvo moderado por Julieta Schulkin, periodista especializada en nuevas tecnologías. Acercamos algunos puntos claves del encuentro:

1) No hay recetas universales.

  • Cada niño es distinto y vive en un contexto distinto, es por eso que no existe una solución única para todos. Cada situación requiere un enfoque personalizado. “Lo más difícil es la falta de certezas: uno puede tener todos los casilleros chequeados (le expliqué, lo acompañé, le dije, no le dije) y aún así que salga algo mal. Es impredecible lo que puede pasar y a veces excede el control adulto”, comentó Carolina Duek. Tanto ella como Andrea Urbas enfatizaron en evitar seguir recetas y enfocarse en adaptar las estrategias a las necesidades y características específicas de cada familia. 

2) Promover una autonomía progresiva. El acompañamiento se debe adaptar a cada edad. 

  • La forma de acompañar a niños, niñas y adolescentes en el uso de la tecnología debe cambiar a medida que crecen. Mientras que en la infancia se necesita un acompañamiento más cercano, a medida que se hacen más grandes, es esencial fomentar su independencia y respetar su intimidad. “No hay que pensar que porque nuestros hijos o hijas son más hábiles para manejarse con ciertas apps o un juego o plataformas, ya están preparados para usarlas y no requieren de nuestra guía. Acompañar la autonomía progresiva es fundamental desde que arrancan a usar tecnologías”, explicó Andrea Urbas. 
  • Carolina Duek, por su parte, remarcó la importancia de respetar la intimidad: “Una forma de pensar esto es reflexionar acerca de nuestra propia adolescencia: seguramente cuidábamos de ciertos objetos como el diario íntimo, los cajones, las cartas. La intimidad de los y las adolescentes hoy está en sus celulares”, explicó.

3) Construir una relación de confianza y espacios de diálogo.

  • Estar presentes en la vida digital de hijos e hijas implica entablar una comunicación constante sobre el uso de la tecnología: hablar con chicos y chicas sobre sus experiencias en línea, sus intereses y preocupaciones en su vida cotidiana. La confianza es fundamental para que sientan comodidad para compartir sus sensaciones y experiencias de la vida digital. “Lo que vemos que más afecta a chicos y chicas es lo que tiene que ver con sus grupos de pares: cómo se establecen los grupos de whatsapp, quiénes participan y quiénes no, cómo se manejan. Como familias debemos darle importancia a esas cuestiones, para que encuentren en nosotros un espacio para conversar sobre estos temas”, resaltó Andrea Urbas. 
  • El diálogo debe estar acompañado de una observación activa: es fundamental prestar atención a sus vínculos sociales y comportamientos en línea. Estar atentos a signos de aislamiento o cambios en sus hábitos puede ayudar a detectar posibles problemas. 

4) Involucrarse en la vida digital

  • Una forma de establecer un vínculo de confianza con chicos y chicas es interesarse por los usos que le dan a los medios digitales. Familiarizarse con las plataformas y aplicaciones que están usando nos permite tener un conocimiento mayor de esos usos. La periodista Julieta Schulkin se centró en este punto: “Quizás una no entiende toda la dinámica del juego, pero chicas y chicos pueden verse muy agradecidos de que una les pregunte qué están haciendo. Pueden aparecer respuestas como ‘Mirá, mamá, te muestro, hice esta isla’ o ‘¿Querés jugar conmigo?’”.

5) Uso equilibrado y contextualizado

  • Algo que preocupa mucho a las familias es el tiempo que pasan chicos y chicas en el celular. Acerca de este tema, Duek sugirió pensar desde la intensificación de las actividades en general:  “La excesividad de una actividad es un problema, ya sea  en medios digitales o analógicos. Cualquier actividad que excluya otro conjunto de actividades puede ser nociva para ese niño, más allá de lo que opinemos nosotros como adultos”, comentó. En esa línea, remarcó la importancia de que como familias podamos abrir distintas puertas a chicos y chicas para que puedan explorar, y guiarlos para que conozcan contenidos que enriquezcan su mundo interior. 
  • No se trata de prohibir el uso de pantallas, sino de acompañarlos a que encuentren  un equilibrio saludable. Fomentar la participación en actividades offline, como juegos de mesa o deportes, y evitar que el tiempo de pantalla reemplace otras actividades importantes como los momentos en familia, las cenas, etc. 
  • Cada situación es única, así que es esencial adaptar las reglas y estrategias a las circunstancias específicas de cada chico y cada familia. 

6) Trabajo en conjunto con la escuela

  • Es importante que como familias trabajemos en colaboración con la escuela para asegurar que el uso de la tecnología en el ámbito educativo sea adecuado al contexto de cada chico o chica. El Estado y las escuelas al día de hoy deben garantizar que los y las docentes puedan recibir capacitaciones para incorporar el uso de la tecnología en el aula de forma crítica y participativa. 

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