A los 13 años empecé a recorrer mi territorio, La Matanza, a identificar problemáticas y conocer distintas formas de vivir la adolescencia. Aprendí que no todos teníamos las mismas oportunidades y me pregunté cómo podía ayudar a los jóvenes de mi edad.
Así llegué a la comunicación en redes, que según como se usen son un arma de doble filo.
Soy estudiante de Comunicación Social en la UBA y mi objetivo es visibilizar y darle voz a los jóvenes. Me interesan causas como la educación, la justicia social, la igualdad y la identidad.